Friday, September 29, 2006
El día del perdón… ¿qué perdón?
Aliza Moreno Goldschmidt - editora
Palabras que pueden figurar como sinónimas, presentan en realidad algunas importantes diferencias entre sí. Estas sutilezas son a veces muy difíciles de señalar cuando intentamos traducirlas o otros idiomas – ya que en ocasiones la otra lengua no poseen paralelos exactos para estas – y en ciertos casos pueden hacer un gran diferencia conceptual.
En español – como en otras lenguas – cuando se habla de Iom Kipur se habla - con exagerada simpleza – del día del perdón. Pero en hebreo, y en las distintas fuentes clásicas que hacen referencia a esta central fecha del calendario judío, se utilizan distintos términos, los cuales en su totalidad podrían traducirse al español como “perdón”: “Kapará”, “mejilá”, y “selijá”.
Tampoco quienes están familiarizados con el necesariamente comprenden las diferencias de estos tres conceptos – en general y lo relacionado a Iom Kipur en particular – razón por la cual han surgido distintas interpretaciones para estos términos entre los sabios de nuestro pueblo.
En esta ocasión quisiera compartir con ustedes algunos conceptos basados en las enseñanzas del gran filósofo y rabino contemporáneo R. Y. D. Soloveitchik, quien dedicó una atención especial a los diversos temas relacionados con las fiestas del mes de Tishrei.
Cuando una persona comete una trasgresión – explica Soloveitchik - este hecho tiene dos consecuencias. Primero que todo, al trasgresor le corresponde un castigo. Pero además, el haber cometido un acto incorrecto deja una mancha en el alma de la persona y lo aleja de su fuente divina. La trasgresión trae consigo la impureza que se impregnan en la personalidad del individuo.
Comprendiendo esto también podemos despejar una antigua duda respecto a la relación entre el perdón y la teshuvá (arrepentimiento) en Iom Kipur: ¿Acaso es indispensable la teshuvá para ser perdonado en Iom Kipur? Si y no. Es decir, por un lado Iom Kipur es un día universal del perdón, independientemente de lo que el hombre haga o deje de hacer. ¿Acaso si nadie hiciese teshuvá se anularía Iom Kipur? Por supuesto que no. Pero por el otro lado, no se puede prescindir de la teshuvá en esta importante fecha, pues ciertamente es indispensable para lograr el cometido final de este día. ¿Cuál es entonces la diferencia?
Es aquí donde los distintos sinónimos relacionados al concepto del“perdón” citados anteriormente juegan un papel y nos permiten clarificar el asunto.
El nombre de Iom Kipur proviene de la palabra kapará, siendo así como este término señala el concepto general del perdón, en el día del perdón. Por su parte, los otros dos conceptos vienen a señalar dos tipos o peculiaridades del concepto perdón.
“Mejilá” – señala Soloveitchik – hace referencia al perdón o mitigación del castigo que le corresponde al individuo según la trasgresión cometida.
En Iom Kipur el Benevolente aminora o anula las sentencias de sus hijos. La magnanimidad del Todopoderoso se manifiesta en este solemne día independientemente de lo que el hombre haga o deje de hacer en su proceso interno de reflexión y teshuvá.
“Selijá” es el resultado de un proceso más complejo, donde el hombre tiene un papel indiscutiblemente activo y participa, junto a la generosidad divina que lo permite, en el proceso de purificación del alma impregnada de los residuos restantes a consecuencia de su trasgresión. “Selijá” es el perdón que renueva la esencia del hombre y le permite regresar a sus fuentes. Es un cambio metafísico en el cual la teshuvá tiene el papel protagónico permitiendo la depuración del espíritu y el regreso del hombre al estado espiritual que antecedió a la trasgresión. La teshuvá es lo que permite el contacto y la relación entre el hombre y su Creador, y la razón de la “Selijá” en Iom Kipur.
Ojalá que todos sepamos aprovechar al máximo, la oportunidad que se nos brinda la próxima semana en el día de Iom Kipur y que seamos merecedores de la “kapará”, “mejilá” y “selijá” del Todopoderoso en el día del perdón.
Palabras que pueden figurar como sinónimas, presentan en realidad algunas importantes diferencias entre sí. Estas sutilezas son a veces muy difíciles de señalar cuando intentamos traducirlas o otros idiomas – ya que en ocasiones la otra lengua no poseen paralelos exactos para estas – y en ciertos casos pueden hacer un gran diferencia conceptual.
En español – como en otras lenguas – cuando se habla de Iom Kipur se habla - con exagerada simpleza – del día del perdón. Pero en hebreo, y en las distintas fuentes clásicas que hacen referencia a esta central fecha del calendario judío, se utilizan distintos términos, los cuales en su totalidad podrían traducirse al español como “perdón”: “Kapará”, “mejilá”, y “selijá”.
Tampoco quienes están familiarizados con el necesariamente comprenden las diferencias de estos tres conceptos – en general y lo relacionado a Iom Kipur en particular – razón por la cual han surgido distintas interpretaciones para estos términos entre los sabios de nuestro pueblo.
En esta ocasión quisiera compartir con ustedes algunos conceptos basados en las enseñanzas del gran filósofo y rabino contemporáneo R. Y. D. Soloveitchik, quien dedicó una atención especial a los diversos temas relacionados con las fiestas del mes de Tishrei.
Cuando una persona comete una trasgresión – explica Soloveitchik - este hecho tiene dos consecuencias. Primero que todo, al trasgresor le corresponde un castigo. Pero además, el haber cometido un acto incorrecto deja una mancha en el alma de la persona y lo aleja de su fuente divina. La trasgresión trae consigo la impureza que se impregnan en la personalidad del individuo.
Comprendiendo esto también podemos despejar una antigua duda respecto a la relación entre el perdón y la teshuvá (arrepentimiento) en Iom Kipur: ¿Acaso es indispensable la teshuvá para ser perdonado en Iom Kipur? Si y no. Es decir, por un lado Iom Kipur es un día universal del perdón, independientemente de lo que el hombre haga o deje de hacer. ¿Acaso si nadie hiciese teshuvá se anularía Iom Kipur? Por supuesto que no. Pero por el otro lado, no se puede prescindir de la teshuvá en esta importante fecha, pues ciertamente es indispensable para lograr el cometido final de este día. ¿Cuál es entonces la diferencia?
Es aquí donde los distintos sinónimos relacionados al concepto del“perdón” citados anteriormente juegan un papel y nos permiten clarificar el asunto.
El nombre de Iom Kipur proviene de la palabra kapará, siendo así como este término señala el concepto general del perdón, en el día del perdón. Por su parte, los otros dos conceptos vienen a señalar dos tipos o peculiaridades del concepto perdón.
“Mejilá” – señala Soloveitchik – hace referencia al perdón o mitigación del castigo que le corresponde al individuo según la trasgresión cometida.
En Iom Kipur el Benevolente aminora o anula las sentencias de sus hijos. La magnanimidad del Todopoderoso se manifiesta en este solemne día independientemente de lo que el hombre haga o deje de hacer en su proceso interno de reflexión y teshuvá.
“Selijá” es el resultado de un proceso más complejo, donde el hombre tiene un papel indiscutiblemente activo y participa, junto a la generosidad divina que lo permite, en el proceso de purificación del alma impregnada de los residuos restantes a consecuencia de su trasgresión. “Selijá” es el perdón que renueva la esencia del hombre y le permite regresar a sus fuentes. Es un cambio metafísico en el cual la teshuvá tiene el papel protagónico permitiendo la depuración del espíritu y el regreso del hombre al estado espiritual que antecedió a la trasgresión. La teshuvá es lo que permite el contacto y la relación entre el hombre y su Creador, y la razón de la “Selijá” en Iom Kipur.
Ojalá que todos sepamos aprovechar al máximo, la oportunidad que se nos brinda la próxima semana en el día de Iom Kipur y que seamos merecedores de la “kapará”, “mejilá” y “selijá” del Todopoderoso en el día del perdón.